Decidí ser MADRE en «solitario», pero no me preparé para ello… Supongo que hay madres que leen, que se informan, que se preparan para una educación consciente, una buena alimentación y para saber todo lo que vendrá antes de que llegue… Yo no… Me tiré a la piscina teniendo claras muchas cosas, pero desconociendo la cantidad de información que después he conocido.
A los tres meses y medio de Nora (mi pequeña y mi luz) nos confirmaron. Mi posparto y nuestro cuarto trimestre juntas, fue muy duro. Mucho sueño, agotamiento físico, horas de pie porteando, ruido blanco, días sin duchar, y mucha soledad… Pero el confinamiento ya fue un remate total. Una cuarentena seguida de otra.
Nos tocó empezar con la alimentación complementaria sin poder ir al pediatra. Solo cogían el teléfono para emergencias. Así que días antes, empecé a buscar como una loca por You tube, Instagram, Facebook, Google… Y me quedé helada al ver tanta información contradictoria entre sí… Gluten si, gluten no, huevo sí, huevo no… Así, que me arriesgué y con las pautas más importantes que vi, empecé.
Recuerdo pensar: – ¿Pero está marranada que es? ¡No voy a poder con esto! – no tenía tiempo ya sin la AC, ya con ella era de broma! Pero Nora decidió por mí con sus caras, sus gestos y sus sonrisas al empezar a comer sólidos. Y tuve que aceptar el BLW si o sí.
Así que solo me puse una norma, vamos a comer lo mismo. ¡Porque no pienso cocinar para dos!
Empecé publicando en mi página particular, lo que comíamos (como siempre había hecho) pero luego pensé, en separar y hacer dos cuentas. Para no aburrir a mis conocidos. Me centré en compartir recetas intercaladas con escritos de nuestro día a día como familia MonoMarental.
¡Nunca
Ojalá alguien se fije en mí o me dé una oportunidad para seguir, mientras, solo puedo agradecer a cada una de mis seguidoras por estar, y seguir COMPARTIENDO y COCINANDO.
Raquel Orgillés Vila
Emprendedora y Mamá de Nora
@blw_receptes